El industrial Adolfo Bohlmann,
en 1869 adquiere la fábrica de
cerveza de “La Cañadilla”, luego del fallecimiento de su fundador, el ciudadano
alemán Juan V. Koch. Bajo el nombre de Fábrica de Cerveza “La Estrella”, Bohlmann procura darle un nuevo impulso haciendo una
fuerte inversión, la cual no da frutos, lo que provoca que al poco tiempo se
retire del negocio cervecero (1878). La fábrica es abandonada y queda en manos
del Banco Nacional de Chile, quien la subasta en varias ocasiones sin tener
postor. Finalmente en 1880 es
adquirida por Andrés Ebner, “en un
puñado de pesos” (1). Esta pequeña y
abandonada fabrica, se convertirá en la gran y famosa Cervecería de Andrés
Ebner, en la Cañadilla 145 (hoy Av. Independencia).
(1) Mariano
Martínez, Industrias santiaguinas, 1896, pag.184