Termina el verano en nuestro hemisferio, y con ello parece, las ganas de tomar cerveza. Desde el mes de Noviembre a Marzo, como plagas las "Fiestas de la Cerveza" se han propagado a lo largo de todo nuestro País.
No muchos sospechaban hace 10 años,
la cantidad de cervecerías artesanales que tendría Chile. Para nosotros como
coleccionistas cerveceros es fantástico, mientras más, más botellas, vasos,
jarros, posavasos, etiquetas, abridores, llaveros, poleras, etc. Tengo registradas poco más
de 600 cervecerías en funcionamiento hoy en día a lo largo de Chilito. Son cervezas de garaje, artesanales, microcervecerías, casas cerveceras,
etc.,etc.-
Tal vez no debería decir esto, pues
soy coleccionista, sin embargo también soy amante de la cerveza, y creo que hay
demasiadas cervecerías y demasiadas cervezas malas.
Era que no, si basta un día sábado
en Santiago para ser Maestro Cervecero. No estoy en contra de las iniciativas o
emprendimientos como se dice hoy, de quienes buscan tener un negocio propio.
Simplemente creo que no está bien que sea tan fácil tener una cervecería, y
cuando digo fácil, me refiero a una iniciativa que parece una cervecería y no
produce cerveza de verdad.
Para que decir de las fiestas de la
cerveza que han proliferado “champiñonescamente” a lo largo de Chile. Allí se
da de todo con fin de ganar un poco de plata. A algunos les basta llevar unos
brebajes parecidos a la cerveza, que se combinan con jugo “Yupi” y son
apreciados por lo ignorantes asistentes, como si fuesen afrutados manjares
divinos, claro que saboreados después de 5 litros previos.
Hay un ejemplo en el Sur de nuestro
País, donde un puñado de cerveceros se han organizado (Agrupación de Cerveceros
Artesanales de la Araucanía), me parece (y espero) que este sea un camino para
mejorar la calidad de las cervecerías y por ende mejorar la cerveza en Chile.
Aún falta mucha educación cervecera
en este país. No sólo los que producen mala cerveza son culpables de ello, sino también los muchos incultos que la beben.
Por el momento sigamos siendo coleccionistas, más adelante,
quizás, además podamos beber más cervezas de calidad, como algunas pocas que tenemos
hoy.