En el desierto de Atacama, al norte de Chile, se
desarrolla la historia de la industria del salitre, que se remonta a 1830,
cuando se realizó el primer embarque de salitre como fertilizante y para la
fabricación de pólvora, hacia Europa y los Estados Unidos. Desde esa época y
hasta 1960 funcionaron en el norte del país unas 198 oficinas salitreras.
Estas salitreras fueron declaradas por la UNESCO,
en julio de 2005, “Patrimonio Industrial y Cultural de la Humanidad”. Y han
sido declaradas Monumentos Nacionales desde 1970.
La más importante de
ellas, por su tamaño y significado, fue la antigua Oficina Salitrera de La
Palma, que en 1934 pasó a llamarse Santiago Humberstone.
La Oficina Humberstone perteneció a la Peruvian
Nitrate Company, inició sus operaciones y la producción de salitre en 1872.
Después de la guerra del Pacifico reanudó sus operaciones para elaborar salitre
y nitratos. Su nombre, Santiago
Humberstone, se debe al ingeniero químico inglés, quien ideo un sistema
mejorado para la lixiviación del caliche (se inyectaba vapor de agua a los
cachuchos, en vez de calentarlos con leña).
Entre 1933 y 1940
Humberstone alcanzó su máximo desarrollo, llegando a albergar una población de
1.700 habitantes (720 trabajadores con sus familias). En 1958 la Compañía
Salitrera de Tarapacá y Antofagasta entró en crisis y terminó por disolverse.
Ese año, Humberstone fue cerrada definitivamente.
Para ese entonces los salarios de los trabajadores no eran pagados con
dinero, sino con monedas propias para uso interno de cada salitrera. A este
abuso de las compañías, se sumaba la suspicaz prohibición a los obreros de
entrar alcohol hacia el interior de las oficinas salitreras, que se debía al
gran lucro que obtenían las compañías, pues las empresas vendían alcohol en la
“Cantina”, “Salón de refrescos” ó bien en la “pulpería”. Una pulpería
estaba equipada con secciones de tienda de géneros, abarrotes en general, carnicería,
panadería y carbonera. El comercio era libre, limitándose solamente la venta de
vino y cerveza, de acuerdo con la
Ley semi-seca vigente.
Este
monopolio del alcohol, llevo a que las compañías salitreras, en su mayoría de
capitales extranjeros, hicieran grandes y variadas importaciones de cerveza de
muchos países. A continuación les presento una variedad de etiquetas que fueron
rescatadas del desierto.